El fin de semana del 1 y 2 de agosto, se celebró el torneo de Oyón, con la participación estelar de una buena representación del Guingangolo y algún colaborador de lujo. Quedada prontito en Gasteiz y viaje hasta Logroño para comer en el Drunken Duck, para afrontar con fuerzas el campeonato.
Encuadrados en el grupo de la muerte, la fase previa, comenzó con un encuentro ante los favoritos para alzarse con el triunfo final, y a punto se estuvo de dar la campanada, pero el buen hacer del rival con jugadores de mucho nivel, hizo que el 3-1 con el que se llegó al descanso se tornase en el 3-4 definitivo.
El mal tiempo que hizo durante la tarde, truncó los planes iniciales de disfrutar de la piscina municipal y a cambio se disputó una reñida partida de mus, para aliviar tensiones de cara al 2º y último partido del día, que se saldó con una cómoda victoria, que servía para depender de nosotros mismos en el partido del domingo por la mañana, ante el rival más flojo del grupo.
Antes de nada, tocaba limpieza de equipaciones, a mano (para oler bien y esas cosas)
Un poquito de relax.
Y de fiesta por Logroño a cenar a base de tinto y pintxos en los lugares más emblemáticos de la capital riojana.
Unas copitxuelas.
Y de vuelta para el "hotel" de concentración, en dos grupos, el primero y menos numeroso aprovechó el camino de vuelta para practicar diversos deportes por las calles de Logroño, como baloncesto con cono o el salto sobre cartel de lona (imágenes a continuación)...
Pero ambas expediciones coincidieron en la parada obligada en la c/Huesca esquina c/Chile, para tomar el tentempié matutino, empanadas, bollería, chori-pan...
Ya el domingo, empanada general y primer partido estrenando camisetas del decathlon (¿se puede ser más pijo?) victoria y a cuartos de final como 2º de grupo a un sólo gol de haber sido primeros.
Otra vez relax, en forma de baño en la piscina de Villa-Antía, y con una empanada aún mayor que la de la mañana partido de cuartos de final, sin comer, con una hora de retraso y con ganas ya de volver a casa. Pero se dio la cara, al menos la primera mitad, que termino en empate a 1. Lo que nos mató fue la segunda parte, un rival que no demostró nada del otro mundo, pudo por físico con el Guingangolo.
Balance muy positivo del torneo, tanto en lo deportivo como en lo social, para repetir el año que viene. Lo curioso es que los dos equipos que nos ganaron llegaron a la final (algo consuela).
Estuvieron:
Asier Antía (anfitrión de lujo)
Asier Argaiz (sólo de día)
David amigo de Argaiz (y menos mal que estuvo)
DvD (pichichi del equipo, por la noche regular)
Fer (se fue sin firmar el contrato)
Sergio (dándolo todo de día y de noche)
Toni (el campo se le hizo pequeño, Logroño no)
Txema (en su linea, ya habeís visto las fotos)
Rubinho (el sábado tremendo, el domingo no le apetecía jugar)
Bajas de última hora
David Asensio e Iker Argaiz (ellos se lo perdieron..)
2 comentarios:
Jajajaja, q grande eres, muchas risas!!!!
No me acordaba yo del pitido de los coches al pasar y vernos hacer el deporte de moda en Logroño!!
Y como bien dices, muy muy repetible
Nadie lo podía haber contado mejor... Qué crack!
Me estoy descojonando en el curro hasta no parar, sobre todo de la cara de Toni al hostiarse con el panel... Parece que iba a echar la raba pero fijo!!!!!!!
Por lo demás, simplemente espectacular el fin de semana.
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