Segundo partido para el Eguren, que tras el comienzo esperanzador del primero, se medía a un rival conocido para alguno de sus integrantes, ya que antaño ambos equipos compartieron cancha de entrenamiento. El regreso de Grober a la convocatoria, era sin duda la mejor noticia para el domingo a las 9 de la mañana.
Los de negro no dejaron pasar mucho tiempo para hacerse con el control de la pelota y las ocasiones comenzaron a llegar de lado local, mientras que el Izotza, basaba su juego en balones largos a su nº 10, sin duda el jugador más destacado de los de verde. Pero el equipo más enchufado dentro del rectángulo de juego, fue el primero en marcar, Jorge aprovecha un rechace tras un saque de esquina y desde la frontal coloca el balón lejos del alcance del portero.
El Eguren dominaba el marcador y el juego, incluso hubo gol anulado a Alex, pero el gran protagonista del encuentro, el árbitro, que continuamente paraba el juego en cada contacto, por más leve que fuese, entendió falta en un choque de un delantero del Izotza contra el pecho de Txema mientras reculaba y al ser dentro del área, se convirtió en un penalti, que ni propios ni extraños podían creerse. El delantero no falló y el gol supuso el empate y el despertar del Izotza, que se veía en el partido sin haber hecho nada por encontrarse en esa situación. Aún así las mejores ocasiones eran para el Eguren, pero ni Alex, ni Javi acertaron con la portería antes del descanso.
En la segunda mitad la clave era sujetar al 10 del Izotza y materializar alguna ocasión, pero en la primera que tuvo, el de verde se fue de su par con una pared y desde la frontal batió a Grober con un buen disparo. La reacción no se hizo esperar y Marco sacó rápidamente una de esas faltas absurdas que pitaba el árbitro, cogiendo a todos por sorpresa, menos a Javi, que marcaba para hacer el 2-2. Pero era la mañana del nº10, el de verde en jugada individual, se internó en el área y se sacó otro chut, que volvió a poner a su equipo por delante.
El juego se seguía interrumpiendo una y otra vez por las decisiones arbitrales y en una de esas faltas, Alex dispara a puerta y el rechace lo caza Txema para conseguir su segundo tanto de la temporada y hacer así el empate. Pero el Izotza, al que la fortuna estaba acompañando, aprovechaba su tercera ocasión para hacer su cuarto tanto, un balón se queda suelto en la frontal y el centrocampista visitante conecta un disparo que da en los dos palos y acaba entrando. Tocaba remontada y el empate lo tuvo Marco con un remate de cabeza que salió por muy poco.
Pero el recital arbitral, no había terminado y para rematar de cobrar protagonismo, en una jugada en la que al delantero se le va el balón lo justo para que llegue Jorge, que recibe una patada en el intento del jugador del Izotza por rematar, el peculiar colegiado interpreta un peculiar penalti, para poner la puntilla por fin al Eguren. El Izotza marca y con poco tiempo por delante ya poco se pudo hacer.
Demasiada recompensa del Izotza, que tuvo 3 ocasiones y metió 5 goles, ayudado por un arbitro, al que su exceso de valentía le llevó a inventarse sendos penaltis, hay veces que te tienen que 'romper una pierna' para que te señalen una falta fuera del área y al colegiado del domingo el mero echo de que dos jugadores se rozasen ya era motivo para sancionarla, eso si patadas se quedaron sin pitar bastantes.
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